Nota de Vicenç Navarro, Rector Emérito de la Universitat Progresista d’Estiu de Catalunya
Cuando leí que Saramago había muerto me sentí como si todos hubiéramos perdido un gran amigo. Cuando los movimientos sociales, los sindicales y los partidos de izquierda decidieron recuperar la Universidad Popular que había existido en Cataluña (nombrándola la “Universitat Progresista d’Estiu de Catalunya”) y me pidieron que dirigiera, como Rector, esta nueva Universidad Popular, le escribí a Saramago para preguntarle si sería receptivo a ser miembro del Consejo Rector de esta nueva Universidad Popular, a lo cual respondió con gran calor humano diciéndome que estaría encantado, pues creía que era una gran labor establecer un fórum de reflexión en el que coincidieran personas de distintas sensibilidades políticas progresistas y envueltos en distintos quehaceres en la vida cotidiana para ir preparando el futuro en Cataluña y en España, recuperando, a la vez, la memoria histórica.
Así fue como pasó a ser miembro fundador y asesor de la UPEC, ofreciendo todo tipo de apoyos, consejos y ayudas. Su muerte nos duele, puesto que aunque estaba lejos físicamente, siempre le sentimos como uno más de nosotros. Y le sentimos ahora más que nunca. Su ejemplo de hombre comprometido, coherente y testimonio vivo de lo que debe ser una persona de izquierdas. Adéu company i amic! Sempre amb nosaltres!